Predicación Expositiva
Creemos que la alimentación espiritual de toda iglesia sana debe provenir de la Palabra de Dios. Aunque esta declaración parezca elemental, es frecuente observar que muchos pastores emplean el tiempo del púlpito en relatos ingeniosos, anécdotas humorísticas o en la transmisión de lo que Christian Smith denomina “deísmo moral terapéutico”. Por tal motivo, en Vida Abundante nos dedicamos a la exposición fiel de la Biblia. Practicamos la predicación expositiva, capítulo por capítulo, versículo por versículo.
Reformados En Parte
Somos una iglesia sin afiliación denominacional. No obstante, algunas personas nos han preguntado si nos identificamos como «reformados».
Nuestra respuesta es la siguiente: compartimos con la tradición reformada su énfasis en la Soteriología, especialmente en lo referente a la gracia y la soberanía de Dios en la salvación. Sin embargo, no adoptamos su postura en Eclesiología ni en Escatología. En cuanto a la Hermenéutica, seguimos el enfoque literal-gramatical-histórico, en lugar del modelo redentivo-histórico que suele caracterizar a las iglesias reformadas y presbiterianas.
Nuestra respuesta es la siguiente: compartimos con la tradición reformada su énfasis en la Soteriología, especialmente en lo referente a la gracia y la soberanía de Dios en la salvación. Sin embargo, no adoptamos su postura en Eclesiología ni en Escatología. En cuanto a la Hermenéutica, seguimos el enfoque literal-gramatical-histórico, en lugar del modelo redentivo-histórico que suele caracterizar a las iglesias reformadas y presbiterianas.
¿Qué De Los Dones Espirituales?
Si usted se interesa en esta sección, es probable que esté familiarizado con los términos “continuacionismo” y “cesacionismo”. En Vida Abundante nos identificamos con la posición cesacionista. Sostenemos que los dones apostólicos cesaron con la conclusión del canon de las Escrituras. No obstante, afirmamos que Dios continúa obrando activamente en Su Iglesia y puede actuar de manera milagrosa conforme a Su voluntad, aunque ningún individuo puede reclamar para sí la función de agente directo de Dios.
Liderazgo
Creemos que la Biblia establece que la iglesia debe ser dirigida por ancianos debidamente calificados. Por tanto, no adoptamos un modelo de liderazgo centrado en un solo pastor. Actualmente, contamos con tres ancianos en funciones y dos hermanos en proceso de evaluación para dicha labor. Asimismo, afirmamos la instrucción del apóstol Pablo a Timoteo, según la cual las mujeres no deben ejercer autoridad ni desempeñar el oficio de enseñanza sobre los hombres dentro de la congregación. En consecuencia, entendemos que la Escritura no autoriza el rol pastoral femenino.
Liturgia
La liturgia constituye la expresión de adoración de la Iglesia.
Al hablar de adoración, no nos referimos únicamente al componente musical del servicio, sino a todo lo que acontece durante la reunión dominical. Creemos que Dios mismo determina la manera en que debe ser adorado, conforme a Su voluntad y no a las preferencias humanas. En consecuencia, la liturgia de nuestra congregación incluye amplias lecturas de las Escrituras, oraciones, himnos y cánticos contemporáneos, la proclamación expositiva de la Palabra y la administración reverente de la Cena del Señor.
Al hablar de adoración, no nos referimos únicamente al componente musical del servicio, sino a todo lo que acontece durante la reunión dominical. Creemos que Dios mismo determina la manera en que debe ser adorado, conforme a Su voluntad y no a las preferencias humanas. En consecuencia, la liturgia de nuestra congregación incluye amplias lecturas de las Escrituras, oraciones, himnos y cánticos contemporáneos, la proclamación expositiva de la Palabra y la administración reverente de la Cena del Señor.
La Música
Damos gran importancia al elemento musical de nuestro servicio de adoración. Por tal motivo, evitamos las canciones de estilo popular contemporáneo «centradas en un mismo», carentes de profundidad teológica y con un enfoque meramente emocional, que suelen predominar en los medios de comunicación. En su lugar, procuramos entonar himnos —tanto antiguos como contemporáneos— y composiciones nuevas escritas por nuestro equipo de alabanza, todas ellas cuidadosamente seleccionadas por su fidelidad doctrinal y su propósito de glorificar a Dios.
